Hombre de origen casi
desconocido, lenguaraz de aborígenes, tropero altamente experimentado, matrero
y “soldado alternativo”, José Luis Molina, mas conocido como El Gaucho Molina,
se ganó un gran espacio en la historia que aún hoy pocos reconocen.
Indómito pero con un
gran sentido la responsabilidad y el amor a su tierra, este bonaerense, con
habilidades poco comunes, y baqueano como el que mas, fue el inspirador de una
táctica de batalla que terminaría años mas tarde en la finalización de la
guerra con Brasil.
El combate del Cerro
de la Caballada será su gran día, aunque la historia oficial todavía lo relega
por su pasado.
Para que muriera
tuvieron que envenenarlo, nadie lo podría matar de frente.
Tal vez convenga
detenernos a conocer a este valiente.